domingo, 28 de septiembre de 2008

Post #28 We already expected that... so what's next?

Este fin de semana fue diferente en muchos aspectos. Mi novio y yo creamos un mecanismo que nos permite sondear cómo va nuestra relación y en caso de ser necesario redefinirla. He pasado muchos días a su lado, en la mañana, en la tarde, en la noche, en la madrugada. Hemos desayunado, cenado, comido. Hemos cocinado y comprado el súper juntos. Hemos cogido como locos. He disfrutado estos 5 meses como nunca lo había hecho con nadie.

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Este fin de semana fue diferente porque en el curso de GMAT no tuve clases de verbal o de mate, tuvimos un curso sobre cómo aplicar exitosamente a las universidades del extranjero, impartida por una chava cuyo trabajo era aceptar o rechazar candidatos al MBA de la universidad de Princetown.

Yo antes pensaba que no había mucha ciencia en enviar copia de un pasaporte, del título y del CV para ser aceptado por una uni. Sobre todo si tenías un buen CV y buena experiencia profesional. Sin embargo, este curso cambió todos mis paradigmas y me gustó mucho porque me sirvió para conocerme más.

Llegó un momento en que me empezó a molestar recibir tanta información, pero después me di cuenta que lo que me molestaba era el tipo de preguntas que me estaban haciendo y que me sacaban de mi zona de confort: qué quiero hacer de mi vida, por qué quiero estudiar una maestría, qué le voy a aportar a la universidad que me acepte, por qué debería ser aceptado por la universidad.

Ese tipo de preguntas no me causaron ninguna molestia pues yo creía tener la respuesta hasta que la gurú nos dijo que haber sido un alumno de excelencia académica con promedio de más de 9.5 en la licenciatura no servía para nada. Que el hecho de tener un excelente puesto en una empresa no eran argumentos suficientes. Que tener ser el dueño de una empresa, que ser joven, que tener aspiraciones altas, que ser emprendedor NO ERAN ARGUMENTOS SUFICIENTES.

Oseaaaaa, ¿Quien en México reúne esos requisitos? Casi nadie. Y además, cómo pueden decir que esos no son argumentos suficientes para que la universidad te acepte? Entonces que quieren... ¿que te puedas teletransportar en 3 segundos por todo el mundo para que te acepten? ¿Que tengas la capacidad de hacerte invisible? ¿O qué?- pensé.

La gurú nos explicó que en el mundo existen 6.3 mil millones de personas y que al año sólo 30,000 deciden estudiar una maestría, entonces que para las universidades es obvio que TODA LA GENTE que se postula es gente con excelente desempeño académico y laboral y que entonces si queríamos ser aceptados tendríamos que aprender a diferenciarnos en otros aspectos.

Y entonces allí viene lo más difícil: responder sobre uno mismo pero de una manera analítica, realista y sobretodo muy personal es lo que definirá si nos aceptan o no.

Y pues bueno, entonces a echarse un clavado en la mente de uno no? Osea, convencer a la universidad con argumentos basados en mi experiencia que estoy dispuesto a salir de mi zona de confort y que ya tengo planes definidos y realizables al terminar el curso. Osea, tantas cosas que me he imaginado pero que no he pensado como tal o verdaderas. Mas bien son planes, no un mandamiento de no? y no puedo llegar a la universidad a decirles que quiero estudiar con ellos porque me caga mi país.

Hay mucha gente intenta hacer lo mismo y pues la rechazan. Obvio no. Entonces pues la pregunta es, sí, ok, quiero irme de aquí pero una vez que esté allá y que termine la maestría qué? Hay muchísimas cosas que tengo que pensar. Tengo que buscar las respuestas en dos lugares, en mi cerebro y en mi corazón, aunque suene muy mamón. Tengo que encontrarlas y no hay de otra, tal vez por eso me molesté un poco.

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La maestra me hizo un cuestionario para saber qué maestría se adecuaba más a mi personalidad y salió que mercadotecnia!!! Estoy feliz, la merca y yo hacemos buen match.

La gurú también nos platicó tantas cosas interesantes, nos hizo cuestionarnos tantas cosas y nos habló de las maravillas que logra alguien que estudia en el extranjero que por un momento pensé que no debía renunciar a mi sueño de estudiar en holanda.

Creo que lo que me faltaba era motivación y ya la obtuve, sí voy a ir por mi GMAT.

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Y si por si esa motivación fuera poco, hay algo en lo que creí, aposté en ello y triunfé: obtuve 620 puntos en mi TOEFL!!!!

1 comentario:

Anónimo dijo...

Pues..CONGRATULATIONS!